Entra un cartero en una casa, y encuentra un cartel que dice, «Cuidado con el loro».
El cartero hace caso omiso y continúa caminando, y encuentra otro cartel que dice, «No moleste al loro».
El cartero un poco asustado abre la puerta, y ve un lorito pequeño y viejo, con un cartel que dice, «Loro peligroso».
El cartero riéndose toca la jaula para saludar al lorito, el loro mira hacia abajo y dice a su perro:
– ¡Dogo, ataca!