Un tío lleva tres horas pescando sin ningún resultado, en esto que viene el cartero del pueblo, mete la mano en el agua y empieza a sacar truchas una tras otra.
– Pero bueno! Como puede hacer eso!
– No, yo es que las pesco con la mano.
– Pero eso tendrá truco, no?
– Bueno, como usted me ha caído bien le diré el truco. Lo único que tiene que hacer usted es meterle la mano ahí mismo a su mujer y después venir a pescar. Al meter la mano en el agua los peces se sienten atraídos y los puede coger con la mano.
– Gracias, gracias.
Total, que el tío recoge los aparejos de pesca y vuelve antes de tiempo a casa para hacer la prueba. Su mujer esta limpiando los cristales y el tío llega por detrás y le mete la mano por debajo de la falda en el lugar correspondiente. La mujer dice:
– Ay, carterito! Que juguetón estas hoy!