Un padre muy enfadado regaña a su hijo: -Pepito, ¿cuántas veces he de decirte que no juegues con cerillas? ¿Qué tengo que hacer para que me hagas caso? -No sé, papá… ¿comprarme un encendedor?
Esperamos que hayas disfrutado del chiste "El niño y las cerillas"